lunes, 15 de agosto de 2016

Un mueble hecho de una parte de lo que respiras.

El CO2 también puede emplearse como materia prima. Las moléculas de dióxido de carbono pueden adherirse mediante  procesos varios para convertirse en materias útiles.
Haciendo muebles a partir de CO2
Lo que se hace con el CO2 es fijar su molécula convirtíendola en otra llamada poliol o polialcohol. Para ello agregan el gas y lo pegan en estos polioles, moléculas alcohólicas muy hidratadas que se usarán como monómeros, los cuales son básicos en la construcción de un polímero: el poliuretano.



Los poliuretanos se usan en construcción como espumas aislantes, como pegamentos selladores, como material textil, moldes, embalajes, piezas mecánicas e incluso muebles. El dióxido de carbono empleado en el proceso termina convirtiéndose en un bello colchón. O en el relleno para un sofá.

La promesa de la metodología es objetiva: convertir un residuo dañoso y problematico en una materia prima.


El dióxido de carbono, al ser uno de los principales protagonistas del calentamiento global y el cambio climático, está en el punto para ser combatido por el mundo. Por otro lado, la técnica para fijar el dióxido de carbono es bastante eficiente, un proceso totalmente limpio. 



publicado por: Sergio Nicolás Ramírez Rozo.

1 comentario:

  1. Una idea muy innovadora la que se desarrolla, me parece bastante genial la utilización de uno de los gases de invernadero mas dañino y abundante en el medio, como materia prima de productos útiles para el hombre y no dejarlo solo como un residuo contaminante, muy interesante.

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